This alert is for Chicago residents only. Please do not complete it if you do not have a Chicago mailing address.
This alert is for Chicago residents only. Please do not complete it if you do not have a Chicago mailing address.
Burning gas in our homes for heating and cooking is expensive, dangerous, and bad for the planet. Just this year alone, Peoples Gas will implement a $300+ million rate hike on consumers. Meanwhile, 21% of childhood asthma cases in Illinois are linked to living in a home with a gas burning stove, and pollution from fossil fuels burned in buildings accounts for 22% of Illinois’ carbon emissions.
Luckily, the City of Chicago can act now to start the transition off of methane gas. Alternatives to gas like induction stoves and heat pumps are ready to be used today. Additionally, dozens of cities and states across the country have passed policies to transition existing buildings off of gas, and ensure all new buildings are fossil-fuel free.
Tell City Council and Mayor Johnson: we want a Chicago where every building is clean and healthy, and where it doesn’t cost an arm and a leg to stay warm in the winter.
This alert is for Chicago residents only. Please do not complete it if you do not have a Chicago mailing address.
------
Diga SÍ a los edificios limpios, saludables y asequibles Consumir gas en nuestros hogares para calentarnos y cocinar es costoso, peligroso y dañino para el planeta. Solo este año, Peoples Gas ha propuesto un alza de tarifas de $400 millones. Mientras tanto, el 21 % de los casos de asma infantil en Illinois están asociados a vivir en un hogar con cocina de gas y la contaminación de combustibles fósiles consumidos en edificios representa el 22 % de las emisiones de carbono del estado.
Afortunadamente, ahora la ciudad de Chicago puede implementar acciones para empezar la transición hacia el abandono del gas metano. Las alternativas al gas, como las cocinas de inducción y las bombas de calor, ya pueden utilizarse. Además, docenas de ciudades y estados de todo el país han aprobado políticas de transición para que los edificios existentes dejen de usar gas y para garantizar que todos los edificios nuevos estén libres de combustibles fósiles.
Dígales al ayuntamiento y al alcalde Johnson: queremos un Chicago donde cada edificio sea limpio y saludable y donde calentarse en invierno no cueste una fortuna.